
Hoy descubrí algo nuevo en mí...
Me aterra el solo hecho de pensar que no doy más de mí,
que no sorprendo, que no supero.
Vivo para los retos y me gusta ir siempre más allá,
superando mi propia visión ante las cosas... superando la visión que en general se tiene de todo y de mi.
Pero que tonta, ¿Porqué he de creerme siempre tan importante?
¿Quién esperaría más de mi que yo misma?
Hoy me pongo una nueva regla en esta lucha:
1. ser feliz.
Si todo lo que hago no cumple la primera regla, hoy lo juro ante la voluntad más imponente, lo dejaré fluir como agua que corre en el río.